¡CUMBIA!

El legendario Carlos Vives habla sobre Cumbiana y el impacto del folclor en la música latina moderna

Las gaitas y flautas de los pueblos indígenas de los Andes se unen al ritmo de los tambores de África, la armonía de los acordeones de Europa y las vibraciones de las guitarras eléctricas de Norteamérica. Es la cumbia, un género mestizo que recuerda con orgullo su herencia folclórica en el corazón de América Latina, pero que hoy en día se proyecta para el mundo con la energía transformadora de los nuevos instrumentos digitales.

“La cumbia es un espíritu que está, no solo en la música de ayer, pero que sigue presente en la música de hoy”, señala Carlos Vives, artista comprometido desde hace más de 30 años con la proyección de la cadencia de estilos como el vallenato, el porro, la cumbia y la champeta junto con otros como el pop, el rock y el reggaetón. Algunos de sus álbumes como La Tierra del Olvido y Clásicos de la Provincia han marcado hitos en la cultura al destacar autores e intérpretes caribeños de antaño junto con nuevos sonidos, para dar a conocer el folclor colombiano en el mundo.

El exitoso ejercicio se repite con Cumbiana, su más reciente  álbum que nace en las profundidades del río Magdalena, aplicando muchos de los patrones característicos del género con nuevas mezclas, sumando colaboraciones destacadas con Jessie Reyez, Alejandro Sanz y Rubén Blades. En este trabajo, el cantautor colombiano hace un esfuerzo especial por rescatar la tradición de los pueblos que habitan en la Ciénaga Grande de Santa Marta, la región donde nació. 

“La mezcla de esas culturas originales americanas con la llegada de África, se suman nuevos instrumentos y nacen nuevos ritmos de la cumbia. En el mundo real de la cumbia en la modernidad [existen] una serie de patrones que pueden ser utilizados con teclados y con los computadores de hoy”, explica. Además, para lograr la proyección de un género tan versátil, también es necesario entender sus variantes y reconocer algunos de sus hermanos cercanos como el vallenato, el chandé, la chalupas, entre otros.

Desde México y Centroamérica hasta Argentina y Chile, la cumbia fue adoptada en la segunda mitad del siglo 20 en muchos de los países de América Latina, encontrando nuevos representantes y ganando nuevos adeptos hasta convertirse en un símbolo que hace bailar a adultos y jóvenes de diversas clases sociales, reflejándose incluso en la música urbana y el reggaetón, tan populares hoy en día.

“Muchos artistas urbanos usan el patrón de la cumbia. Nadie dice ‘Hola, estoy haciendo una cumbia’, pero todos usan el patrón de la cumbia en la música urbana, destaca, haciendo referencia a canciones como Atrévete-te-te de Calle 13 u otras de artistas como Camilo o Sebastián Yatra, demostrando el impacto que tiene el género en la música latina actual. 

“El legado que espero dejar con Cumbiana es que la gente conozca el territorio donde nace la cumbia, donde se generan esa serie de patrones que se han usado en la música colombiana y que pasaron a la modernidad. Si logramos además con la promoción de esta música lograr llamar la atención de estos problemas sociales y ecológicos que tiene la región, entonces habremos de verdad dejado un legado realmente importante, y entonces ahí sí, habrá cumbia por mucho tiempo”, concluye Carlos Vives.

Escucha aquí Cumbiana, el último álbum de Carlos Vives, y conoce más sobre este género latinoamericano en el espacio dedicado a la Cumbia en Spotify.